En un contexto donde el gobierno chileno ha anunciado una inversión significativa de 4 mil millones de dólares para mejorar la infraestructura del aeropuerto internacional de Santiago, la situación de los terminales de buses interprovinciales presenta un panorama alarmante. La Asociación Nacional de Buses de Chile ha expresado su preocupación por el abandono que sufren estos terminales, que son esenciales para la movilidad de millones de chilenos. La ministra de Obras Públicas, Jessica López, ha centrado su atención en el aeropuerto, dejando de lado las necesidades urgentes de los terminales de buses.
### La Desigualdad en la Inversión en Infraestructura
La inversión en el aeropuerto de Santiago tiene como objetivo triplicar su capacidad para el año 2050, permitiendo movilizar a 84 millones de pasajeros anuales. Sin embargo, la Asociación Nacional de Buses de Chile sostiene que no se ha realizado una inversión similar en los terminales de buses durante décadas. Carolina Navarrete, gerente general de la asociación, ha señalado que el gobierno debe reconocer la importancia de este medio de transporte, que mueve alrededor de 80 millones de pasajeros al año, superando ampliamente a los 28 millones que utilizan aviones.
La falta de atención a los terminales de buses se traduce en condiciones de infraestructura que son consideradas «indignas» por los representantes del gremio. Navarrete ha enfatizado que las autoridades no han respondido a las demandas de inversión en infraestructura vial y en los propios terminales, lo que afecta directamente a la calidad del servicio que se puede ofrecer a los pasajeros. La situación es aún más crítica si se considera que los terminales de buses son el principal medio de transporte en Chile, llegando a 346 comunas del país y sirviendo a personas de todos los niveles socioeconómicos.
La gerente general de la asociación ha manifestado su frustración ante la falta de respuestas del gobierno, a pesar de las múltiples reuniones mantenidas con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas. La inversión en infraestructura no solo es necesaria para mejorar las condiciones de los terminales, sino también para garantizar la seguridad y la calidad del servicio que se ofrece a los usuarios. La falta de políticas adecuadas que fortalezcan este medio de transporte es un tema que preocupa a los representantes del gremio.
### La Urgencia de una Nueva Política de Infraestructura
La situación actual de los terminales de buses es crítica. Navarrete ha señalado que los terminales ya están en su límite de capacidad, tanto en sus accesos como en su interior. Esta realidad ha llevado a la Asociación Nacional de Buses de Chile a plantear la necesidad de iniciar gestiones para reunirse con los candidatos presidenciales. La esperanza es que los futuros líderes del país reconozcan la importancia del transporte de pasajeros y la infraestructura necesaria para su funcionamiento.
«El bus es el verdadero democratizador de la movilidad en Chile», ha afirmado Navarrete, quien exige que el Estado no deje atrás a los millones de chilenos que dependen de este medio de transporte. La falta de inversión en infraestructura no solo afecta a las empresas de buses, sino que también impacta en la experiencia de los pasajeros, quienes merecen viajar con estándares dignos y modernos.
La Asociación Nacional de Buses de Chile espera que tanto el gobierno actual como el próximo reconozcan el rol social y estratégico de esta industria. La inversión en infraestructura es esencial para mejorar las condiciones de seguridad, la normativa y las condiciones dignas para los pasajeros. La falta de atención a estos aspectos podría tener consecuencias graves para la movilidad de millones de chilenos, quienes dependen del transporte interprovincial para sus desplazamientos diarios.
En resumen, la inversión en infraestructura de los terminales de buses es una necesidad urgente que no puede ser ignorada. La Asociación Nacional de Buses de Chile hace un llamado a las autoridades para que no olviden la importancia de este medio de transporte y se comprometan a realizar las inversiones necesarias para mejorar las condiciones de los terminales y las vías que los conectan. La movilidad de millones de chilenos está en juego, y es responsabilidad del gobierno garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a un transporte digno y eficiente.