La carrera presidencial en Chile se intensifica a medida que se acercan las elecciones, y los candidatos buscan atraer a votantes de diversas corrientes políticas. En este contexto, han surgido debates sobre a quiénes votarían figuras históricas de la política chilena, como Salvador Allende, Augusto Pinochet, Patricio Aylwin, Jaime Guzmán y Sebastián Piñera, si estuvieran vivos en la actualidad. Este ejercicio no solo refleja las inclinaciones políticas de los candidatos, sino también el legado que estas figuras han dejado en la sociedad chilena.
El debate comenzó cuando Ruth Hurtado, secretaria general del Partido Republicano, afirmó que Jaime Guzmán, fundador de la UDI, votaría por José Antonio Kast. Esta declaración generó reacciones en la UDI, donde se cuestionó la interpretación de Guzmán y su posible alineación con el actual candidato. Kast, por su parte, también se posicionó, sugiriendo que si Guzmán estuviera vivo, él mismo estaría en la UDI. Esta controversia se amplió cuando la exalcaldesa Evelyn Matthei fue criticada por usar la imagen de Patricio Aylwin en su campaña, lo que llevó a la candidata oficialista Jeannette Jara a señalar que esto era similar a lo que los republicanos habían hecho con Guzmán.
En este contexto, la encuesta «Termómetro Político», realizada por Descifra, buscó determinar las preferencias de votación de estas figuras históricas. Los resultados revelaron que un 38% de los encuestados cree que Augusto Pinochet votaría por Johannes Kaiser, del Partido Nacional Libertario, mientras que un 37% opina que lo haría por Kast. Por otro lado, solo un 13% considera que Matthei sería su opción. En cuanto a Salvador Allende, un 62% de los encuestados piensa que votaría por Jeannette Jara, mientras que Eduardo Artés sigue con un 15%.
Las preferencias de votación de Jaime Guzmán también fueron objeto de análisis. La mayoría de los encuestados, un 36%, considera que votaría por Kast, seguido de cerca por Matthei con un 34%. En cuanto a Patricio Aylwin, sorprendentemente, Matthei lidera con un 35%, mientras que Jara ocupa el segundo lugar con un 22%. Finalmente, en el caso de Sebastián Piñera, un abrumador 66% de los encuestados cree que votaría por Matthei, lo que refleja la cercanía entre ambos en términos de ideología política.
Este ejercicio de simulación estadística no solo pone de manifiesto las preferencias de votación, sino que también resalta la complejidad del panorama político chileno. La encuesta se realizó entre hombres y mujeres mayores de 18 años, de diversos niveles socioeconómicos, y se aplicó a través de un muestreo aleatorio y estratificado. Con un margen de error de +/- 2,9% y un nivel de confianza del 95%, los resultados ofrecen una visión representativa de las opiniones de la población.
El uso de figuras históricas en la campaña electoral no es un fenómeno nuevo, pero en este caso, se ha intensificado debido a la polarización política actual. Los candidatos buscan conectar con los votantes a través de la nostalgia y el reconocimiento de líderes pasados, lo que puede influir en la decisión de los electores. Sin embargo, también plantea preguntas sobre la autenticidad de estas conexiones y si realmente reflejan las creencias y valores de los candidatos actuales.
A medida que se acercan las elecciones, es probable que este tipo de debates continúen, y los candidatos deberán navegar cuidadosamente entre el legado de figuras históricas y sus propias propuestas políticas. La forma en que se perciben estas conexiones puede tener un impacto significativo en la percepción pública y, en última instancia, en los resultados de las elecciones. La política chilena sigue siendo un campo de batalla donde las sombras del pasado influyen en el presente, y las elecciones presidenciales de este año no son la excepción.
