En la actualidad, el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) se ha convertido en un tema de conversación común, especialmente en el ámbito digital. Frases como «Perdón, es mi déficit atencional» se han popularizado en redes sociales, donde muchas personas utilizan este término para justificar olvidos o dificultades para concentrarse. Sin embargo, esta tendencia de autodiagnóstico puede ser problemática y engañosa, ya que los síntomas asociados al TDAH pueden ser manifestaciones de otros problemas emocionales más profundos.
### La Confusión de los Síntomas
La proliferación de contenido en plataformas digitales ha facilitado que muchas personas se identifiquen con descripciones generales del TDAH. Sin embargo, los especialistas advierten que la falta de atención no es exclusiva de este trastorno. Problemas como la ansiedad, la depresión, el insomnio y el estrés asociado a un ritmo de vida acelerado pueden provocar síntomas similares. Claudia Szita, académica de Psicología en la Universidad Andrés Bello, enfatiza que la atención es una función compleja influenciada por múltiples factores emocionales y sociales.
Uno de los errores más comunes es pensar que cualquier dificultad para concentrarse equivale a tener TDAH. Esta simplificación puede llevar a un sobrediagnóstico, donde las personas se etiquetan a sí mismas sin una evaluación profesional adecuada. Szita señala que el diagnóstico debe ser el resultado de un proceso clínico serio que considere la historia personal y el entorno del individuo. Identificarse con un video o un test en línea no es suficiente para llegar a una conclusión sobre la salud mental de una persona.
Además, etiquetar los síntomas como «déficit» puede ocultar su verdadera función. Lo que a menudo se interpreta como desatención o inquietud podría ser una señal de malestar emocional que no ha encontrado otra vía de expresión. Szita argumenta que cuando se reduce todo a un déficit, se pierde la oportunidad de comprender el síntoma como una manifestación de algo más profundo. Por lo tanto, es crucial mirar más allá de la etiqueta y explorar las causas subyacentes de estos síntomas.
### La Importancia de una Evaluación Profesional
En este contexto, es fundamental abordar los síntomas no como fallas individuales, sino como manifestaciones enmarcadas en un entorno emocional y social. La psicóloga destaca que es importante considerar los vínculos y la vida emocional de la persona. A menudo, lo que está en juego no es lo que falta en el individuo, sino lo que no logra sostener el entorno: adultos sobrecargados, sistemas rígidos y una cultura que exige atención en un mundo que fragmenta la vida misma.
La invitación de los especialistas es clara: evitar la tentación del diagnóstico exprés y optar por una evaluación profesional. Esta vía no solo permite detectar con precisión lo que ocurre, sino también diseñar un tratamiento ajustado a la realidad de cada persona. Autodiagnosticarse puede parecer un acto de autonomía, pero en realidad es una forma de evitar el verdadero trabajo terapéutico, que implica mirar hacia adentro, comprender el malestar y construir nuevas formas de estar en el mundo.
Es esencial que las personas comprendan que los síntomas de distracción o inquietud pueden ser el resultado de una combinación de factores emocionales y sociales. La presión del entorno, las expectativas laborales y las exigencias diarias pueden contribuir a un estado de sobrecarga que se manifiesta en la dificultad para concentrarse. Por lo tanto, es vital que quienes experimentan estos síntomas busquen ayuda profesional para entender mejor su situación y recibir el apoyo adecuado.
En resumen, el autodiagnóstico puede ser un fenómeno peligroso que trivializa condiciones complejas como el TDAH. La atención a la salud mental debe ser un proceso cuidadoso y reflexivo, que considere la totalidad del individuo y su contexto. La búsqueda de un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado puede marcar la diferencia en la calidad de vida de las personas que enfrentan estos desafíos. La salud mental es un aspecto fundamental del bienestar general, y abordarla con seriedad y profesionalismo es esencial para lograr un verdadero entendimiento y tratamiento de los síntomas que se presentan.