En el contexto de un mundo cada vez más polarizado, la relación entre China, Rusia e India se ha convertido en un tema de gran relevancia geopolítica. Desde la tesis de la analista austriaca Velina Tchakarova en 2015, que planteaba que la alianza entre el «Dragón» (China) y el «Oso» (Rusia) tendría repercusiones significativas en el equilibrio de poder global, hasta los recientes encuentros entre líderes de estas naciones, el panorama internacional está cambiando rápidamente. Este artículo explora la evolución de esta alianza y sus implicaciones para el orden mundial.
La reciente reunión entre Xi Jinping y Vladimir Putin en Tianjin, en el marco de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), ha reafirmado la fortaleza de esta alianza. La presencia del primer ministro indio, Narendra Modi, en este encuentro añade una nueva dimensión a la dinámica de poder en Asia. La inclusión de India, a menudo referida como el «Elefante», en esta coalición, sugiere un intento de crear un bloque que desafíe la hegemonía estadounidense en el ámbito global.
### La Reunión de Tianjin: Un Símbolo de Unidad
La cumbre en Tianjin, que tuvo lugar a finales de agosto de 2025, no solo fue un encuentro diplomático, sino un claro mensaje de unidad entre estos tres países. Xi Jinping, en su discurso, enfatizó la necesidad de que Rusia, India y otros países de la región se unan a China para aprovechar su influencia económica y desafiar a Occidente. Este llamado a la acción se produce en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas, donde la guerra comercial liderada por Estados Unidos ha llevado a muchos países a reconsiderar sus alianzas y estrategias.
Durante la cumbre, Xi también presentó una «iniciativa de gobernanza global» que promueve principios como la igualdad soberana y el multilateralismo, en un claro intento de establecer un nuevo marco de cooperación internacional que excluya a Estados Unidos. Este enfoque no solo busca consolidar la influencia de China, sino también ofrecer una alternativa viable al orden mundial existente.
La participación de Modi en la cumbre es particularmente significativa. Su visita a China, la primera en siete años, marca un cambio en las relaciones entre ambos países, que habían estado tensas debido a conflictos fronterizos y rivalidades históricas. Modi calificó su reunión con Xi como «fructífera», lo que sugiere un deseo de ambos líderes de avanzar hacia una cooperación más estrecha. Este acercamiento no solo beneficia a China, sino que también permite a India fortalecer su posición en el escenario internacional.
### Implicaciones para el Orden Mundial
La creciente colaboración entre China, Rusia e India plantea preguntas sobre el futuro del orden mundial. La alianza, aunque aún en desarrollo, tiene el potencial de convertirse en un contrapeso significativo a la influencia de Estados Unidos. La creación de un banco de desarrollo de la OCS que otorgue préstamos en divisas distintas del dólar estadounidense es un paso hacia la desdolarización de la economía global, lo que podría debilitar la posición de Estados Unidos en el sistema financiero internacional.
Sin embargo, la relación entre estos países no está exenta de tensiones. Aunque comparten intereses comunes, las diferencias culturales y políticas pueden complicar su colaboración. Por ejemplo, la relación entre India y China ha sido históricamente problemática, y la inclusión de Kim Jong-un en el desfile militar en Beijing podría ser vista con recelo por Nueva Delhi. La falta de un objetivo común claro más allá de desafiar a Occidente podría limitar la efectividad de esta alianza.
Además, la guerra en Ucrania y las tensiones en el Mar del Sur de China son recordatorios de que el camino hacia un nuevo orden global no será fácil. La dependencia de Rusia de China para el apoyo económico y militar en su conflicto con Ucrania también plantea preguntas sobre la equidad de esta relación. Aunque ambos países se presentan como aliados, la realidad es que Rusia se encuentra en una posición vulnerable, lo que podría llevar a una dinámica de poder desigual en la alianza.
En este contexto, la figura de Xi Jinping se ha consolidado como un líder que busca redefinir el papel de China en el mundo. Su capacidad para reunir a líderes de diferentes naciones y promover una visión alternativa del orden internacional es un testimonio de su ambición. Sin embargo, la efectividad de esta estrategia dependerá de su habilidad para mantener la cohesión entre sus aliados y navegar las complejidades de las relaciones internacionales.
La reciente cumbre de la OCS y los eventos relacionados han puesto de manifiesto que el mundo está en un punto de inflexión. La alianza entre China, Rusia e India podría ser el inicio de un nuevo capítulo en la historia de las relaciones internacionales, donde el equilibrio de poder se reconfigura y las viejas dinámicas son desafiadas. A medida que estas naciones continúan fortaleciendo sus lazos, el impacto en el orden mundial será significativo y duradero.