La situación en Gaza se ha vuelto crítica tras el inicio de una ofensiva terrestre por parte del Ejército israelí, que comenzó la noche del 15 de septiembre de 2025. Este ataque se produce en un contexto de creciente presión internacional y acusaciones de genocidio contra el Estado de Israel. Según informes de funcionarios médicos locales, al menos 35 personas han perdido la vida y decenas más han resultado heridas o desaparecidas debido a los bombardeos y la incursión militar en la Ciudad de Gaza.
La operación, denominada «Gideon’s Chariots II», busca expandir las actividades militares en Gaza City, un área considerada como el centro de poder de Hamas. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han declarado que su objetivo es desmantelar las capacidades militares de Hamas y recuperar a los rehenes en manos del grupo. Sin embargo, esta ofensiva ha sido condenada por diversos organismos internacionales, incluyendo una comisión de la ONU que ha calificado las acciones israelíes como genocidio.
### Reacciones Internacionales y Aislamiento Diplomático
El rechazo a las acciones de Israel ha sido contundente. La Comisión Internacional Independiente de Investigación, que no actúa en nombre de la ONU, ha afirmado que «el genocidio está ocurriendo en Gaza y continúa ocurriendo», responsabilizando directamente al Estado israelí. En respuesta, el gobierno israelí ha desestimado estas afirmaciones, calificándolas de «distorsionadas y falsas». El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel ha pedido la abolición de la comisión de investigación, argumentando que su trabajo está sesgado.
En medio de este clima tenso, el presidente de Irlanda, Michael Higgins, ha sugerido que Israel y los países que le suministran armas deberían ser excluidos de las Naciones Unidas. Esta declaración resuena con el creciente sentimiento en Europa, donde la Unión Europea está considerando la suspensión parcial del acuerdo comercial con Israel, una de las medidas más severas adoptadas hasta la fecha. Kaja Kallas, alta representante de política exterior de la UE, ha confirmado que se está preparando para suspender las disposiciones comerciales preferenciales del Acuerdo de Asociación UE-Israel, lo que podría tener un impacto significativo en la economía israelí.
### La Respuesta de Netanyahu y el Contexto Económico
En medio de este aislamiento internacional, el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha admitido que Israel enfrenta una «especie de aislamiento» que podría extenderse por años. En una conferencia reciente, Netanyahu enfatizó la necesidad de que la economía israelí se adapte a una mayor autosuficiencia, sugiriendo que el país debe prepararse para un futuro en el que dependa menos del comercio exterior. Estas declaraciones son vistas como un reconocimiento del creciente rechazo internacional hacia las políticas de su gobierno.
El impacto económico de este aislamiento podría ser profundo. En 2024, el comercio bilateral entre Israel y la UE alcanzó los 42.600 millones de euros, de los cuales un 37% se benefició de acuerdos arancelarios preferenciales. La suspensión de estos acuerdos podría significar un alto costo para Israel, que ya se enfrenta a embargos de armas por parte de varios países europeos.
A pesar de las críticas y el aislamiento, Netanyahu ha insistido en continuar con la ofensiva en Gaza, argumentando que es un deber moral para recuperar a los rehenes y desmantelar a Hamas. Sin embargo, esta postura ha generado descontento incluso dentro de Israel, donde muchos ciudadanos y familiares de rehenes han expresado su preocupación por la escalada del conflicto y sus consecuencias humanitarias.
La situación en Gaza sigue siendo crítica, con miles de personas desplazadas y huyendo hacia el sur en busca de seguridad. Las FDI han instado a los residentes a evacuar, distribuyendo panfletos que advierten sobre la peligrosidad de permanecer en ciertas áreas. Sin embargo, las salidas de la ciudad están bloqueadas, lo que ha dejado a muchos atrapados en medio del conflicto.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación cómo se desarrolla esta situación, mientras las tensiones continúan aumentando y las posibilidades de un diálogo pacífico parecen cada vez más lejanas.