El año 2017 marcó un antes y un después en la vida de Ignacio Lastra, quien sufrió un grave accidente automovilístico en Providencia, Santiago. Este trágico evento no solo dejó secuelas físicas, con cerca del 90% de su cuerpo quemado, sino que también transformó su vida en un camino de recuperación y autodescubrimiento. A ocho años de aquel fatídico día, Ignacio ha encontrado una nueva vocación en las charlas motivacionales, donde comparte su experiencia y busca inspirar a otros.
### La Recuperación: Un Proceso Lento pero Seguro
La recuperación de Ignacio no fue un proceso sencillo. Tras el accidente, enfrentó un largo camino de rehabilitación que abarcó tanto su salud física como su bienestar emocional. Durante este tiempo, tuvo que lidiar con la pérdida de oportunidades laborales y la incertidumbre sobre su futuro. Sin embargo, a pesar de los desafíos, Ignacio se mantuvo enfocado en su recuperación.
En sus propias palabras, Ignacio expresó que no estaba listo para hablar públicamente sobre su experiencia inmediatamente después del accidente. «No podía entregar nada. Era una persona que estaba en vías de recuperar su vida», comentó. Esta reflexión muestra la importancia de estar en un lugar emocional y mental adecuado antes de compartir experiencias tan personales y dolorosas.
A medida que pasaron los años, Ignacio comenzó a sentir que había recuperado el control de su vida. Logró volver a trabajar y alcanzar una estabilidad económica, lo que le permitió sentirse más seguro y preparado para compartir su historia. Este proceso de sanación no solo fue físico, sino que también implicó un profundo trabajo interno que le permitió redescubrir su identidad más allá de las cicatrices.
### Un Nuevo Comienzo: Las Charlas Motivacionales
Fue en 2018, un año después del accidente, cuando Ignacio recibió su primera propuesta para realizar charlas motivacionales. Sin embargo, decidió rechazarla, sintiendo que aún no estaba preparado. No fue hasta este año, 2025, que finalmente dio el paso y se presentó ante una audiencia de 140 personas, superando sus propios miedos y expectativas.
Ignacio dedicó una semana a preparar su charla, enfocándose en la prevención de accidentes de tránsito. Este enfoque no solo refleja su deseo de ayudar a otros, sino también su compromiso con la educación y la concienciación sobre la seguridad vial. La experiencia de hablar ante un grupo tan grande fue abrumadora, pero también gratificante. «Primero se suponía que era para 30 personas, pero cuando llegué eran muchas más. Tenía miedo», confesó Ignacio, quien luego se sintió aliviado y emocionado al interactuar con su audiencia.
La charla no solo fue un espacio para compartir su historia, sino también un momento de conexión con las personas presentes. Ignacio se dio cuenta de que su personalidad y su valor no se basaban únicamente en su apariencia como exmodelo, sino en la fortaleza y la resiliencia que había cultivado a lo largo de su vida. Este descubrimiento fue un paso significativo en su proceso de sanación y aceptación.
Ignacio Lastra se ha convertido en un símbolo de superación y esperanza. Su historia es un recordatorio de que, a pesar de las adversidades, es posible encontrar un nuevo propósito y ayudar a otros en el camino. Las charlas motivacionales que ahora imparte son una extensión de su viaje personal, donde busca inspirar a quienes enfrentan sus propias luchas y desafíos.
A medida que Ignacio continúa su camino, su mensaje resuena con fuerza: la vida puede cambiar en un instante, pero con determinación y apoyo, es posible reconstruirla y encontrar nuevas oportunidades. Su historia es un testimonio de la capacidad humana para adaptarse, sanar y, sobre todo, seguir adelante.