La candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei, ha intensificado su crítica hacia el gobierno actual, planteando serias preocupaciones sobre la gestión de las finanzas públicas. En un reciente comunicado desde su comando, Matthei advirtió que su sector condicionará la tramitación de la Ley de Presupuesto 2026 a una total transparencia en las cuentas del Estado. Esta postura refleja un creciente descontento entre los sectores de la derecha tradicional, quienes consideran que la falta de claridad en las finanzas podría tener repercusiones graves para el país.
### La Denuncia de Inequidad en los Pagos del Estado
Matthei ha señalado que el gobierno no está cumpliendo con los pagos correspondientes a contratos suscritos por diversos ministerios, especialmente en áreas críticas como Vivienda, Obras Públicas y Salud. Según la candidata, existe una ley que obliga al Estado a pagar las facturas en un plazo de 30 días, sin embargo, ha denunciado que el gobierno se toma hasta cuatro meses para autorizar dichas facturas. Esto, según ella, crea una inequidad significativa entre el Estado y las pequeñas empresas, muchas de las cuales son contratistas o subcontratistas.
«Hay una inequidad terrible entre el Estado y las empresas pequeñas. Si una empresa factura y no recibe el pago a tiempo, nunca más será contratada», afirmó Matthei, enfatizando que esta situación no solo afecta a las empresas, sino que también distorsiona la realidad de las cuentas fiscales. La candidata argumenta que las cifras que se están presentando al público son engañosas, ya que la deuda real del Estado es mucho mayor de lo que se reconoce oficialmente.
La preocupación de Matthei se centra en la necesidad de que el gobierno sea completamente transparente sobre sus deudas y obligaciones, advirtiendo que la falta de claridad podría llevar a una crisis de confianza en las cuentas fiscales del país. «Si las cuentas fiscales no son creíbles, estamos hablando de un país que se ha vuelto cada vez más bananero», declaró, sugiriendo que la situación actual podría poner en riesgo la estabilidad económica de Chile.
### Condiciones para la Tramitación de la Ley de Presupuesto
La postura de Matthei es clara: no se tramitará ninguna ley de presupuesto este año si no se garantiza la transparencia total en las finanzas públicas. Esta declaración es un llamado a la acción para el gobierno, instando a que se aborden las preocupaciones sobre la gestión de los recursos del Estado. La candidata ha manifestado que la falta de transparencia no solo es un problema administrativo, sino que también tiene implicaciones políticas y sociales.
«Lo que he visto a lo largo de Chile es que estas deudas están afectando gravemente a sectores como Vivienda, Obras Públicas y Salud. Necesitamos que se transparenten totalmente estas situaciones, porque a mi juicio se está pasando a llevar la Ley de Presupuesto», enfatizó. Esta afirmación resalta la importancia de la rendición de cuentas en la administración pública y cómo la falta de ella puede afectar a los ciudadanos en su vida diaria.
La crítica de Matthei se enmarca en un contexto más amplio de desconfianza hacia las instituciones gubernamentales, donde la transparencia y la rendición de cuentas son fundamentales para mantener la confianza del público. La candidata ha hecho un llamado a todos los sectores políticos para que se unan en la búsqueda de una mayor claridad en la gestión de las finanzas públicas, argumentando que esto es esencial para el bienestar de la nación.
La situación actual en Chile plantea desafíos significativos para el gobierno y los partidos políticos, y la postura de Matthei podría influir en el debate sobre la Ley de Presupuesto 2026. La candidata ha dejado claro que su sector no aceptará menos que una total transparencia, lo que podría llevar a un enfrentamiento en el Parlamento si no se abordan estas preocupaciones.
En resumen, la arremetida de Evelyn Matthei contra el gobierno no solo es una crítica a la gestión actual, sino también un llamado a la acción para mejorar la transparencia en las finanzas públicas. Su postura refleja un descontento creciente entre los sectores de la derecha y plantea interrogantes sobre la credibilidad de las cuentas fiscales en Chile. La forma en que el gobierno responda a estas críticas y si se compromete a una mayor transparencia será crucial para el futuro político y económico del país.