La actriz chilena Claudia di Girolamo ha decidido alzar la voz tras el reciente sobreseimiento de Cristián Campos, quien fue denunciado por abuso sexual por Raffaella di Girolamo, su expareja. Este caso ha generado un intenso debate sobre la efectividad del sistema judicial en la protección de las víctimas de abuso y la lucha contra la impunidad. En una reciente entrevista, Claudia compartió su perspectiva sobre el fallo de la Corte Suprema y las implicaciones que este tiene para las víctimas de abuso en el país.
La decisión de la Corte de Apelaciones de confirmar el sobreseimiento de Campos, argumentando que no se encontraba probada su participación en los hechos, ha sido recibida con gran descontento por parte de Claudia. Ella enfatizó que, a pesar de la resolución, no se puede interpretar como una declaración de inocencia. «Yo no leo en ninguna parte de la resolución de la Corte Suprema la palabra ‘inocente’ o ‘inocencia’. Él es un abusador con todas sus letras», afirmó, dejando claro su desacuerdo con la forma en que se ha manejado el caso.
La actriz también destacó la indiferencia del sistema judicial, que, según ella, ha permitido que personas que han cometido delitos graves se sientan libres de actuar sin temor a las consecuencias. «En estas últimas dos instancias vimos la peor cara de la justicia, que es la indiferencia, y que da pie a la impunidad», comentó. Esta situación, según Claudia, no solo afecta a las víctimas directas, sino que también envía un mensaje desalentador a quienes han sufrido abusos, haciéndoles sentir que no hay un camino claro hacia la justicia.
### La Voz de las Víctimas y el Silencio Cultural
Claudia di Girolamo también reflexionó sobre el impacto cultural que tiene este tipo de resoluciones en las víctimas de abuso. Ella argumentó que muchos se verán desalentados a hablar sobre sus experiencias, creyendo que no serán escuchados o que no habrá justicia para ellos. «Muchas personas que fueron o ahora mismo son víctimas de abuso ven este caso y dicen, y ahora a dónde puedo ir o quién me va a dar una mano, quién me va a creer, quién me va a escuchar», expresó, resaltando la necesidad de crear un entorno donde las víctimas se sientan seguras al compartir sus historias.
La actriz hizo hincapié en que el silencio es un terreno fértil para la perpetuación de la culpa, la vergüenza y el miedo. Este fenómeno, según ella, es culturalmente peligroso, ya que puede llevar a que las víctimas, tanto mujeres como hombres y personas de diversas identidades de género, opten por guardar silencio en lugar de buscar ayuda. Claudia enfatizó que es crucial que las instituciones encargadas de proteger a las víctimas cumplan con su deber y se comprometan a erradicar la violencia en todas sus formas.
En cuanto a los pasos a seguir, Claudia mencionó que aún hay puertas que tocar, pero que no se anunciarán públicamente en el corto plazo. «Yo creo que ahora hay que escuchar a la Raffa, hay que escuchar su parecer y respetar su proceso de sanación, respetar su corazón y su mente», dijo, mostrando su apoyo a la denunciante y su deseo de que se le brinde el espacio necesario para sanar.
### La Importancia del Primer Fallo
A pesar de la frustración con los fallos posteriores, Claudia di Girolamo valoró el trabajo del juez Edgardo Gutiérrez, quien fue responsable del primer fallo en el caso. Ella destacó que este juez estableció un estándar de prueba y una perspectiva de género que fueron fundamentales para reconocer la existencia de abusos. «Hay un solo fallo que determina que los abusos sí ocurrieron», afirmó, subrayando la importancia de la investigación realizada por Gutiérrez, que se prolongó por más de un año y que permitió una presentación equitativa de pruebas y testimonios.
Sin embargo, Claudia lamentó que las instancias superiores, como la Corte de Apelaciones y la Corte Suprema, no hayan tomado en cuenta el trabajo del juez Gutiérrez. «Ambas instancias cerraron la puerta a leer el fallo del Juez Gutiérrez, a escuchar el testimonio y revisar todas las pruebas presentadas», criticó, señalando que esto contribuye a un clima de impunidad que afecta a las víctimas de abuso.
Finalmente, Claudia recordó que Chile ha firmado el acuerdo de Belém do Pará, comprometiéndose a proteger los derechos humanos de las mujeres y a erradicar la violencia en todas sus formas. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de que las instituciones cumplan con sus compromisos y trabajen activamente para garantizar la justicia y la seguridad de todas las víctimas de abuso en el país.