La situación de Araceli Vitta, actriz chilena, ha captado la atención del público debido a su lucha por el cumplimiento de una millonaria deuda en pensión alimenticia que su expareja, el excantante Daniel Guerrero, mantiene desde hace meses. La deuda asciende a más de 30 millones de pesos, y la actriz ha expresado su frustración ante la falta de avances en el proceso judicial. En diversas entrevistas, Vitta ha compartido detalles sobre su experiencia, que parece más una telenovela que una realidad.
La historia comenzó a tomar forma a principios de abril, cuando Araceli Vitta se presentó en un programa de televisión para hablar sobre la situación. En ese momento, reveló que había solicitado una orden de arresto contra Guerrero, quien, a pesar de tener una orden judicial en su contra, no ha sido localizado por las autoridades. «Le puse una orden de arresto y el tribunal ordena a la PDI que se ejecute esta orden. Ellos habían sacado la dirección que Daniel tenía en el tribunal y no era. Sacaron la dirección del SII y no era, del registro civil y tampoco era. Y no pasó nada», comentó la actriz, visiblemente frustrada.
La búsqueda de Guerrero ha sido complicada. A pesar de que Araceli logró obtener su dirección actual y la presentó ante el tribunal, el proceso ha sido lento y lleno de obstáculos. «Conseguí la dirección de hoy y mi abogado la subió al tribunal de familia. La jueza dictaminó una nueva orden de arresto, pero amplia, es decir, lo pueden tomar detenido no solo en su casa, sino donde lo encuentren», advirtió Vitta, quien ha estado lidiando con esta situación durante un tiempo considerable.
### La Actualidad de la Deuda Alimentaria
Recientemente, Araceli Vitta hizo una aparición en el programa «Que te lo digo» para promocionar su obra de teatro «Radojka». Durante la entrevista, se le preguntó sobre el estado actual de la deuda de pensión alimenticia. Con un tono de resignación y humor, la actriz respondió: «Todavía estamos en eso. Es eterno, es una media teleserie, yo vivo una teleserie, soy la protagonista (…) Yo ahora me río, pero es como tragicómico». A pesar de su intento de tomar la situación con ligereza, la realidad es que la deuda sigue sin resolverse.
Araceli también mencionó que, a pesar de la orden de arresto, no ha recibido ninguna respuesta concreta de las autoridades. «Ni siquiera han dado una respuesta, porque lleva meses con orden de arresto y no pasa nada», expresó. Esta falta de acción por parte de la Policía de Investigaciones (PDI) ha llevado a la actriz a cuestionar la eficacia del sistema judicial en su caso. «El Tribunal funciona, pero no depende de ellos. El abogado ingresa el escrito, pidiendo la orden de arresto, el Tribunal resuelve y dice ‘ok’. Mandan la orden al Tribunal que corresponda para que ellos ordenen a la PDI», explicó.
La frustración de Vitta es palpable, ya que ha tenido que lidiar con la burocracia y la ineficiencia del sistema. «Todo ese trámite pasó, la PDI tenía dos meses para rendir cuentas y ahora como no sabemos nada, mi abogado acaba de pedir al Tribunal que le diga a la PDI que les cuente qué pasó», comentó. La actriz ha decidido hacer pública su situación no solo para buscar justicia, sino también para visibilizar el problema de las deudas alimentarias en el país.
### La Realidad de Ser Madre Soltera
Araceli Vitta ha sido clara en su mensaje: la deuda alimentaria no solo afecta a ella, sino también a su hijo, quien ha crecido y se ha convertido en un universitario gracias a los esfuerzos de su madre y sus abuelos. «Mi hijo ya está grande, ya estudió, es un universitario todo gracias a mí y mis padres. Pero la deuda existe y si uno la tiene, hay que pagarla», enfatizó. Esta declaración resalta la importancia de la responsabilidad parental y el impacto que las deudas alimentarias pueden tener en la vida de los niños.
La situación de Araceli Vitta es un recordatorio de que, a pesar de las apariencias, la vida de las figuras públicas puede estar llena de desafíos y luchas personales. La actriz ha decidido enfrentar su realidad con valentía, utilizando su plataforma para hablar sobre un tema que afecta a muchas familias en el país. Aunque la deuda de Daniel Guerrero sigue sin resolverse, la historia de Araceli es un testimonio de la perseverancia y la lucha por la justicia en el ámbito familiar. Su experiencia podría inspirar a otras personas en situaciones similares a no rendirse y a seguir luchando por sus derechos y los de sus hijos.