A medida que se acerca la cuenta pública del Presidente Gabriel Boric, las expectativas entre los sectores oficialistas son elevadas. Sin embargo, Tomás Leighton, director ejecutivo de Rumbo Colectivo, ha señalado la necesidad de realizar un balance crítico sobre el cumplimiento de las promesas del gobierno. Un estudio elaborado por este centro de estudios del Frente Amplio indica que el 62,7% de las medidas comprometidas en el programa de gobierno han sido cumplidas o parcialmente cumplidas. A pesar de esta cifra, Leighton expresa su insatisfacción, sugiriendo que el cumplimiento debe ser evaluado en un contexto más amplio.
### Evaluación del Cumplimiento de Promesas
Leighton destaca que el gobierno ha logrado resolver una de las grandes incertidumbres: la reforma previsional. Este avance es significativo, pero plantea la pregunta sobre el cumplimiento de las 702 promesas originales del Presidente Boric. Según el análisis, un 60% de cumplimiento es considerado normal en el contexto político actual, comparándolo con el 66,8% de cumplimiento de Pedro Sánchez en España en un momento similar de su mandato. Sin embargo, Leighton advierte que para que la coalición oficialista pueda aspirar a un nuevo mandato, es crucial retomar y discutir los compromisos que aún están pendientes.
Uno de los puntos críticos que menciona es la tendencia a catalogar como logrados proyectos que han perdido su esencia original, como la reforma de pensiones, que prometía eliminar las AFP. Este tipo de situaciones pone de manifiesto las dificultades que enfrentan los gobiernos para cumplir con sus programas, especialmente en un país como Chile, donde Boric ha tenido que lidiar con un récord de ocho elecciones durante su mandato de cuatro años. Esta situación ha generado un cambio en las prioridades ciudadanas y ha complicado la correlación de fuerzas en el parlamento.
### Desafíos y Promesas Pendientes
Leighton también señala que hay varios temas que no se han cumplido como se esperaba, incluyendo la implementación de las 40 horas laborales y las medidas de seguridad en La Araucanía. La capacidad de un gobierno para navegar en tiempos de cambio es fundamental, y el actual gobierno ha enfrentado desafíos significativos debido a la evolución de las prioridades de la ciudadanía. Sin embargo, esto no puede ser una excusa para no avanzar en la discusión de temas importantes, como el proyecto de aborto, que fue un compromiso de campaña.
La falta de propuestas concretas en áreas críticas, como la salud, es motivo de preocupación. Según el estudio, hay 29 compromisos relacionados con la salud que aún no han sido iniciados, incluyendo la creación de un seguro universal de salud, un tema central para la agenda de la izquierda. La necesidad de discutir estos pendientes es vital para la continuidad de la coalición, ya que no hacerlo podría tener repercusiones electorales en el futuro.
Leighton enfatiza que, aunque la presentación de proyectos es un paso importante, no es suficiente para considerarlos cumplidos. La responsabilidad del gobierno es presentar iniciativas que respondan a las promesas hechas a la ciudadanía. La falta de avance en ciertas áreas, como la reforma al impuesto a la renta, también genera inquietud. Abandonar promesas de campaña puede ser complicado y podría afectar la percepción pública del gobierno.
En el contexto de la agenda de género, el gobierno ha logrado avances significativos, pero la falta de progreso en el proyecto de despenalización del aborto podría opacar estos logros. La desprotección de mujeres jóvenes de sectores populares es un tema que no puede ser ignorado, y la discusión sobre este proyecto debe continuar, independientemente de la falta de apoyo legislativo.
Leighton concluye que los gobiernos deben perseverar en sus propuestas originales o, al menos, ofrecer explicaciones sustantivas sobre los cambios en sus prioridades. La capacidad de un gobierno para presentar proyectos y avanzar en su agenda es fundamental para mantener la confianza de la ciudadanía y garantizar la continuidad de su coalición en el futuro. En un contexto donde los tiempos políticos son inciertos, la responsabilidad de cumplir con las promesas y de presentar iniciativas concretas es más relevante que nunca.